Un grupo de legisladores estatales de Florida (EE.U.U) alertó este lunes de que la disolución del distrito especial que le permite a Walt Disney World el autogobierno ocasionará la mayor subida de impuestos a la propiedad en Orange y Osceola, los condados donde se asienta este popular complejo de parques temáticos.
En una rueda de prensa desde Orlando, en el centro de Florida, la senadora demócrata Linda Stewart, junto a sus colegas Randolph Bracy y Victor Torres, criticó que la ley saliera adelante a toda prisa y sin un estudio sobre sus consecuencias, lo que podría llevar a que los residentes de ambos condados tengan que afrontar los mil millones de dólares en deuda de bonos del distrito.
“El gobernador establecerá un nuevo distrito, eso es lo último que hemos escuchado (…), controlado por el gobernador con nombramientos” hechos por este. Por lo tanto la deuda sería pagada, “si así fuera el caso, por el estado de Florida por más de mil millones de dólares”, señaló Stewart.
Precisó que ello conduciría a la mayor subida de impuestos a la propiedad en la historia de los condados de Orange y Osceola, donde se extiende este distrito especial de unos 25.000 acres (más de 10.000 hectáreas).
Los tres senadores demócratas lamentaron que la reciente ley firmada por el gobernador estatal, Ron DeSantis, que elimina seis distritos especiales, entre ellos el de Reedy Creek y donde el complejo de parques opera de forma autónoma desde hace más de 50 años, fuera una represalia por las críticas hechas por Disney.
La firma de la ley se dio luego de que la compañía criticara la promulgación de la polémica norma conocida popularmente como “Don’t Say Gay” (“No digas gay”), que, entre otras cosas, prohíbe a los maestros hablar en las aulas a los alumnos de hasta segundo grado sobre orientación sexual e identidad de género.
“La libertad de expresión aún existe, digo que la dejen en paz, dejen en paz a los condados de Orange y Osceola”, manifestó Stewart.
Los tres coincidieron en que, a causa de las prisas, el proceso de gestación de la ley se ha saltado algunos vigentes estatutos y que tienen que ver con el voto a favor o en contra de la disolución por parte de la pequeña población del distrito.
“No creo que haya ningún interés en que ese distrito de Reedy Creek se disuelva”, aventuró la senadora.
“Disney no es el que está siendo castigado por este proyecto de ley. Los trabajadores y los contribuyentes sí lo son”, dijo por su parte Torres, tras aludir a modo de ejemplo a los más de 400 bomberos que trabajan en esta jurisdicción.
Bracy calificó la ley de “irresponsable” y dijo además que la discusión sobre la creación de un nuevo distrito es “descabellada”. “Lo que (DeSantis) ha hecho es esencialmente aumentar los impuestos en los condados de Orange y Osceola”, añadió el legislador.
El gobernador ha señalado recientemente que su oficina discute cuales serán los próximos pasos tras la firma de esta ley, que entrará en vigor el 1 de junio del próximo año, pero, según dio a entender la semana pasada durante un cabildo abierto organizado por la cadena conservadora Fox News, la idea es que la deuda en bonos la asuma Disney.
Don Greer, miembro de la junta de este distrito, manifestó días atrás que es incierto el futuro de este distrito tras la ley, pero en todo caso en gran medida dependerá del estado.
“Pasará un tiempo antes de que alguien sepa a qué nos enfrentamos”, señaló tras una reunión de la junta de este distrito especial.
El Walt Disney World de Orlando contaba desde 1967 con la categoría de distrito especial, un sistema de autogobierno que le permitió crecer hasta tener media docena de parques temáticos, un centro deportivo, un enorme centro comercial, 25 hoteles, su propia policía y cuerpo de bomberos y cerca de 80.000 empleados.
EFE