Érika Mora, la activista política que se grabó en ropa interior para celebrar su postulación a unas elecciones del chavismo en Venezuela
“Que suba la temperatura”: postulante del Psuv pidió votos en pantaletica
“¡Que suba, suba, que suba, suba, la temperatura…!”. De esa forma, tarareando el coro de la canción “La Temperatura”, del intérprete colombiano Maluma, comienza una mujer un clip de vídeo, mientras se graba en ropa interior, haciendo recorrer la cámara por toda su silueta.
La mujer menciona a su “líder de calle”, a su “líder jefe de comunidad” y se señala a sí misma como futura líder jefe de UBCH, de la parroquia Coromoto, Barrio Obrero, en la parte alta de la ciudad de San Cristóbal.
La autora del vídeo dice también: “De Táchira pa’ Miraflores con Marcos Pérez Jiménez. Wao, Wao, Wao, happy weekend. Empresaria Érika Mora, presidenta del Imperio Fe… postulándose… para las elecciones del sábado”.
La mujer, con acento venezolano y quien mira a la cámara sin pestañear, como si estuviera bajo la influencia de algún tipo de hipnótico, menciona a varias figuras del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) a quienes envía sus bendiciones.
Les pide a los líderes chavistas estar alerta con la infiltración opositora en las elecciones, pautadas para el sábado 3 de septiembre en Venezuela, y que tienen como propósito la renovación de las Unidades de Batalla Hugo Chávez (UBCH), también conocidas como Unidades de Batalla Bolívar Chávez, un grupo político de organizaciones con múltiples miembros del PSUV involucrados que tienen características políticas, electos por las bases.
Si lo que está mujer hizo está mal, o está bien, evidentemente la opinión pública se ha expresado. Nuestra duda, nuestra inquietud, más allá de la opinión es preguntarnos ¿ESTÁ NO ES UNA VERSIÓN DE LO QUE HACE LACAVA? O de lo que otros han hecho en el pasado como Lina Ron por ejemplo.
Quizá el cansancio, el hastío por el lenguaje político tradicional nos este llevando a presenciar estas expresiones de la sodoma y gomorra en la que están envueltos nuestros partidos, y líderes políticos.
La reflexión queda. Haga usted el juicio.