Un grave caso de corrupción y delincuencia involucra a las empresas Fríos Roraima, C.A. y Alimentos Comarca, C.A, dedicadas a la importación y distribución de alimentos en Venezuela. El pasado jueves 1 de junio, la Receita Federal de Brasil realizó un operativo en la ciudad de Pacaraima, fronteriza con Venezuela, en el que se enfrentó a tiros con contrabandistas de salchichas que pretendían ingresar ilegalmente a territorio venezolano.
Los contrabandistas utilizaban automóviles con matrícula venezolana, que estaban estacionados en las instalaciones en Pacaraima de Fríos Roraima, compañía que cuenta con una filial venezolana del mismo nombre. Uno de los vehículos logró escapar hacia el lado venezolano de la frontera, cargado con salchichas distribuidas por la empresa.
Fríos Roraima es una compañía que opera en Venezuela en asociación con Alimentos Comarca, ubicada en la ciudad de Los Teques, estado Miranda. Ambas empresas se presentan como importadoras y distribuidoras de alimentos de «óptima calidad» para el consumo humano. Sin embargo, detrás de esta fachada parecen esconderse negocios turbios y prácticas ilegales que ponen en riesgo la salud de quienes consumen sus productos.
Los socios de Fríos Roraima son el brasileño Allan Luiz de Oliveira y el venezolano Nuno Condesso Martínez Martins, conocido como “El Rey del Contrabando de la Salchicha”, quienes cuentan con el apoyo de Willians Paulo Mischur, quien funge como CEO de la compañía. Oliveira tiene procesos judiciales en Brasil, entre otros motivos, por la evasión de impuestos a la circulación de mercancías, hecho que evidencia la falta de transparencia en el manejo de sus negocios.
Ante los hechos ocurridos en la frontera, Fríos Roraima y Alimentos Comarca emitieron un comunicado conjunto en el que han intentado negar cualquier vinculación con el contrabando de salchichas. El comunicado reza lo siguiente:
«A NUESTROS CLIENTES, PROVEEDORES Y PÚBLICO EN GENERAL Nosotros, FRIOS RORAIMA, C.A, Y ALIMENTOS COMARCA, C.A. Empresas de gran trayectoria, caracterizadas por su máximo compromiso con el pueblo venezolano, importando y distribuyendo alimentos de óptima calidad para el consumo humano, hacemos de conocimiento público que: debido a los acontecimientos y falsas noticias publicadas en las últimas horas del día 02 de junio de 2023, sin ninguna seriedad ni objetividad, basadas en hechos aislados, han sido vinculadas a nuestras empresas, creadas con el fin de desprestigiar la intachable reputación de éstas, manipulando hechos e imágenes con la notable intención de crear un matriz de opinión errada. De manera que, negamos de forma ENFÁTICA toda denuncia publicada en páginas web y redes sociales de dudosa procedencia y credibilidad, aseguramos que, no guardan relación con nuestras empresas.
En tal sentido, Fríos Roraima, C.A. y Alimentos Comarca, C.A, han trabajado ajustadas a derecho y legalidad en todos los procesos que les corresponde para su correcto funcionamiento.
Nuestras empresas están abiertas a cualquier proceso legal de investigación proveniente de los órganos administradores de justicia venezolana.»
Una persona consultada, al tanto de las actividades de Fríos Roraima y Alimentos Comarca, catalogó el comunicado como «una burla al sentido común y «una muestra del cinismo y la impunidad con que actúan estas empresas». La fuente indicó que ambas compañías, no solo no explican por qué motivo la Receita Federal de Brasil ejecutó el operativo contra los contrabandistas ni por qué existen procesos judiciales en Brasil contra uno de sus socios, sino que además se atreven a afirmar que distribuyen alimentos de «óptima calidad», cuando en realidad en ciertos casos se trata de productos caducados o adulterados.
Entre los productos brasileños distribuidos por Fríos Roraima y Alimentos Comarca se encuentran las salchichas Laranjal, Natur-al y Rezende; margarina Delicata, azúcar Sonora; compuesto lácteo Ótimo de Piracanjuba; galletas Rancheiro y otros.
Otras fuentes consultadas revelaron que tanto Fríos Roraima como Alimentos Comarca han incurrido en graves irregularidades sanitarias al distribuir alimentos con fechas de vencimiento alteradas o reempacados con etiquetas falsas. Indicaron que estas prácticas ponen en riesgo la salud pública tanto en Brasil como en Venezuela y deberían ser investigadas y sancionadas por las autoridades competentes.
Las fuentes indicaron que estas empresas se aprovechan de la escasez y la necesidad de la población venezolana para venderles alimentos de baja calidad, sin importarles las consecuencias que puedan tener para su salud. Asimismo, señalaron que estas empresas evaden los controles aduaneros y tributarios, lo que genera un perjuicio económico para ambos países.
Las fuentes hicieron un llamado tanto a las autoridades sanitarias como al Ministerio Público venezolano, en procura de una investigación de los hechos y una sanción ejemplar para los responsables de este flagrante delito contra la salud y la economía de los pueblos de Brasil y Venezuela. Advirtieron además del riesgo que representa el mal manejo, refrigeración y conservación de los alimentos brasileños para los compradores venezolanos.
