«Somos el cuarto país exportador de carbonato de litio. Nos enfrentamos al desafío de agregar valor a este insumo», remarcó el titular de la empresa Y-TEC, Roberto Salvarezza, al detallar que la fábrica de celdas estará destinada al abastecimiento de energía eólica y solar.
El titular de la empresa de investigación energética Y-TEC, Roberto Salvarezza, aseguró que el desafío es que Argentina se convierta en un «jugador estratégico» para la región por la producción de baterías de litio, tras indicar que en septiembre ya estará en funcionamiento la fábrica de celdas para baterías de litio que encararon con la Universidad Nacional de La Plata.
Adelantó además que la planta que tienen previsto abrir en Santiago del Estero «quintuplicará» la producción de la primera.
«Somos el cuarto país exportador de carbonato de litio. Nos enfrentamos al desafío de agregar valor a este insumo», remarcó Salvarezza para precisar que «nuestro objetivo es que en septiembre de este año tengamos una planta de producción de celdas de baterías de litio».
La primera planta tendrá capacidad para producir las celdas de las baterías que permitirán, por ejemplo, almacenar la energía eólica y solar para poblaciones que hoy están desconectadas de la red eléctrica.
«Esta misma tecnología la tendremos para una planta con la provincia de Santiago del Estero, que será cinco veces mayor que ésta», adelantó Salvarezza en diálogo con AM530.
Las celdas son las unidades funcionales que generan energía y que van ensambladas con un controlador electrónico; eso constituye la batería de litio que, según Salvarezza, «son el 30 o 40% de un vehículo eléctrico».
«La planta de YTEC y la Universidad Nacional de La Plata, que va a generar celdas para baterías para más de 2.000 viviendas, básicamente va a estar destinada a abastecimiento de energía eólica y solar; para escuelas rurales, instituciones publicas o poblaciones aisladas de red», señaló
Agregó que «la planta de Santiago del Estero está más dedicada a electromovilidad, motos eléctricas o side car, autos, colectivos y otros vehículos que hoy se fabrican en el país», y que «todas esas empresas importan la batería o bien compran las celdas».
La producción de ambas plantas «es suficiente para atender la demanda real en el país en cuanto a vehículos eléctricos y almacenamiento de energía solar y eólica», remarcó.
Por ello, subrayó que «el gran desafío es escalar esto» y lograr que Argentina «sea un jugador estratégico cuando el Mercosur comience la transición energética».