Un estudio sostiene que Venezuela se ubica entre los dos países más contaminantes en términos relativos de emanación de metano por unidad de energía extraída.
La información de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) ubica a la nación caribeña entre los dos mayores emisores, junto a Turkmenistán y en el extremo opuesto de bajos niveles se encuentran Noruega y Países Bajos.
El metano es responsable de un tercio del calentamiento global desde la revolución industrial, teniendo un efecto en el corto plazo mucho más fuerte que el CO2.
Estas conclusiones advierten sobre la necesidad de contener las pérdidas de este potente gas de efecto invernadero, especialmente en territorios con una huella de carbono como Venezuela.
Según la agencia, para reducir el 75% de las emisiones de metano generadas por los combustibles fósiles para 2030, que es lo que haría falta para alinearse con el objetivo de un calentamiento global limitado a 1,5 grados centígrados, se necesitaría una inversión de 170.000 millones de dólares.
Tras dicho informe, Venezuela queda retratada entre los Estados que libera mayores niveles de metano en proporción a su producción energética.