Tras nueve años sin regresar a su tierra natal, la actriz de contenido para adultos, María Antonella Alonso Brigati, mejor conocida como La Sirena 69, encontró la oportunidad perfecta para visitar Caracas y es que, más allá de los buenos comentarios que había escuchado sobre la situación de Venezuela, una propuesta de trabajó tocó a su puerta y la llevó a terminar de tomar la decisión de darse un paseo por acá, pero las cosas no salieron como ella lo esperaba.
Con información de El Farandi
La Sirena 69 fue escogida como invitada especial para “Bisiesto 2024”, una fiesta que se celebró en las instalaciones de Eco Lounge, la discoteca ubicada en el Estadio Monumental Simón Bolívar, el pasado 29 de febrero.
El evento lo promocionaron, a través de las redes sociales, las influencers Lale y Dani Barranco, pues participaron como productoras y -en videos eliminados- habían relatado que la idea surgió después de que en TikTok estuviesen publicando un contenido al que llamaron “el reality” y les permitía mostrar parte de sus vivencias, sobre todo en fiestas, y desde entonces los internautas comentaban que querían compartir con ellas.
Aunque para algunos fue llamativo el hecho de que no se hizo mayor bulla, ni el día de la fiesta y tampoco post evento, no se hizo mayor investigación al respecto.
Ahora, La Sirena 69 ha participado como invitada en el podcast 99% de los también venezolanos Isra y Abelardo, espacio en el que habló abiertamente de lo que sucedió.
“Se hace el evento, yo cumplo con todo lo que dice el contrato. Lo que yo tenía que hacer, era promocionar la fiesta, estar ahí, tomarme fotos con las personas porque yo era una host”, inició contando, agregando que se confió “de sus hermanos venezolanos” permitiendo recibir una mínima parte del pago antes de la fiesta porque según al terminar, cancelarían en su totalidad.
Pasado el evento, al día siguiente, La Sirena procede a pedir su otra parte del pago a lo que le respondieron que no se le daría. Comentó que los organizadores le hablaron sin dar mucha explicación, no obstante, ella consideró que tomaron esa decisión porque no les fue bien y no lograron sumar tantos dividendos, por lo que les propuso reunirse y así llegar a un acuerdo, pero la respuesta volvió a ser negativa.
Ante su molestia, ella decidió no dar pelea con esta persona que había figurado como intermediario, pero le comentó que lo haría público, pues no permitiría que ningún otro artista regresara al país para llevarse este choque, a lo que esta persona -en tono de amenaza- le recomendó que si lo hacía, procurara hacerlo fuera del país o sino estar atenta a las consecuencias.
Ante el susto, María Antonella adelantó la fecha de su pasaje y decidió regresar cuanto antes a Los Ángeles, ciudad de Estados Unidos en la que reside actualmente.