Estudio de Accenture revela que en 2021 solo 27 compañías en el mundo han logrado un equilibrio entre estos dos objetivos y les permitirá incrementar sus ingresos en 18%. En tanto, el resto solo registrará un crecimiento en torno al 4%.
2021 será recordado como el año de la salida masiva a bolsa de empresas en todo el mundo. Según información del proveedor de datos Refinitv, 2021 cerró con 2.097 salidas a plazas bursátiles y una recaudación histórica de US$ 594.000 millones. Pese a la euforia de los mercados en alza y a las millonarias valorizaciones logradas por las compañías, los ingresos de estas, sin embargo, no han tenido la misma suerte.
De acuerdo con el estudio “Beyond 2021: how to get ahead and stay ahead”, de la consultora Accenture, existe una importante disparidad entre aumento de capitalización de mercado de gran parte de las empresas y su crecimiento. Tal es la diferencia, según el análisis de la firma, que solo 27 compañías a nivel global han alcanzado un equilibrio entre ambos aspectos. Esta veintena de empresas crecerá 18% este año, mientras que el resto solo alcanzará un crecimiento cercano a 4%.
El estudio de Accenture muestra que en el periodo 2007-2017 la brecha entre ambos indicadores se ubicaba en 0,9x en favor del crecimiento de ingresos (ver gráfico). Mientras que entre 2017 y 2019 pasó a 1,4x para la capitalización de mercado, margen que creció a 3,7 veces entre 2019 y 2021. Esto, debido a que el volumen de capitalización pasó de 9,8% a 23,7%, mientras que el crecimiento cayó de 7,1% a 6,4%, por lo que la disparidad mostró un considerable aumento.
Pero ¿por qué se produce esta disparidad entre capitalización bursátil e ingresos? Para Guillermo Orrillo, director ejecutivo de Strategy & Consulting de Accenture Chile, este fenómeno se debe principalmente a que la mayor parte de las compañías a nivel mundial no están fomentando al mismo tiempo cuatro elementos: la responsabilidad empresarial, la inteligencia operativa, personalización y seguridad.
“La primera se refiere a impulsar una cadena de valor sostenible, transparente y ética. La segunda se trata de avanzar mucho más allá de la digitalización y aplicar las nuevas tecnologías para impulsar la inteligencia operativa. La personalización se refiere a entregar experiencias únicas tanto para consumidores como para colaboradores y la seguridad de ofrecer servicios y productos que protejan continuamente la información de las personas”, dice el ejecutivo, quien apunta que las empresas que están liderando en estos elementos son las que registran mayores crecimientos de ingresos.
Y aunque el informe de la consultora, que parte de una base de 1.300 empresas en todo el mundo, no precisa cuáles son estas, sí se puede deducir que gran parte de las firmas que han incrementado su capitalización bursátil son las tecnológicas, dado el boom de salidas a bolsa y el buen momento que goza esta industria tras la pandemia.
Así, según datos de Bloomberg al 29 de diciembre de 2021, las estadounidenses Apple, Microsoft y Alphabet encabezan el top 3 de empresas con mayor valor en Bolsa con crecimientos de 36%, 55% y 67,4%, respectivamente en comparación al mismo periodo de 2020.
Apple, por su lado, arrancó 2022 convirtiéndose en la primera empresa de Estados Unidos en alcanzar una capitalización bursátil de US$ 3 billones, triplicando así su valor en cuatro años. Solo queda esperar si sus ingresos en 2021 avanzaron al mismo ritmo que su valor en Bolsa.
¿Y EN AMÉRICA LATINA?
Respecto a nuestra región, si bien no se entregó un análisis particular de los casos en América Latina, el reporte global de Accenture consideró a empresas chilenas, argentinas y colombianas de los sectores minería, retail, energía y bienes de consumo.
Aunque la firma no desveló las empresas incluidas en el estudio, Latinoamérica cuenta con casos variados, donde no necesariamente se refleja la tendencia global en favor de la capitalización bursátil, según constató AméricaEconomía.
Por ejemplo, una tecnolatina de gran experiencia en bolsa y que ganó terreno en este campo dado el auge de las compras online es Mercado Libre. Así, mientras que al cierre del segundo trimestre de 2019 el valor de la acción de la compañía fundada por Marcos Galperín se cotizaba en Nasdaq en US$ 611,77, dos años después, es decir a fines de junio de 2021 su valor escaló a US$ 1.541. Actualmente, la acción de Mercado Libre se sitúa en US$ 1.129 y su capitalización bursátil asciende a US$ 57.000 millones, según Google Finance.
Este incremento de capitalización también se reflejó en sus ingresos netos que pasaron de US$ 545,2 millones en el segundo trimestre de 2019 a US$ 1.700 millones en el mismo periodo de 2021. Las utilidades también siguieron la tendencia alcista al pasar de US$ 272,4 millones a US$ 753,9 millones en dichos periodos.
En Colombia, Promigas, la compañía dedicada al transporte y distribución de gas natural y electricidad, ha mostrado un desempeño positivo en ambos planos. Por ejemplo, registró una evolución favorable en el precio de su acción. Muestra de ello es que el 30 de junio de 2019 el precio cerró en COP 6.000 (pesos colombianos), unos US$ 1,49 y dos años después subió a COP 6.755 (US$ 1,68).
Sin embargo, por el lado de los ingresos, la compañía ha tenido también impulsos muy favorables. Registró COP 295.576 millones (unos US$ 72,4 millones) en el segundo trimestre de 2019 y COP 1,1 billones (unos US$ 269,6 millones) en el mismo periodo de 2021. Las utilidades, por su lado, pasaron de COP 226.000 millones (US$ 55,3 millones) a COP 0,3 billones (US$ 73,5 millones).
Otras compañías chilenas, como Embotelladora Andina, Colbún SA, CMPC han tenido caídas en su capitalización bursátil, lo cual no se ha producido necesariamente en sus ingresos. Grupo Argos y Nutresa de Colombia, también han tenido caídas en sus valoraciones en el período de mediados de 2019 hacia mitad de 2021 y lo mismo sucede con otras empresas como YPF de Argentina, lo cual atenta contra la brecha global entre ambos parámetros del estudio.
Asimismo, SQM (Sociedad Química y Minera de Chile), empresa productora de litio ha experimentado una buena racha en bolsa y en sus resultados financieros como consecuencia de una mayor demanda global de este recurso. El 1 julio de 2019 el valor de la acción en la Bolsa de Nueva York llegaba a US$ 29,49, mientras que dos años después lo hacía a US$ 47,50, alcanzando incluso un valor de US$ 62,26 en noviembre de 2021. Con la cifra actual, al cierre de esta edición, situada en US$ 47,66 por acción, la capitalización de la compañía llegaba a los US$ 13.616 millones.
En el plano de los ingresos, hasta el 30 de junio de 2019 la minera reportó un total de US$ 494,1 millones. Dos años después los ingresos ascendieron a US$ 588 millones. En tanto, las utilidades pasaron de US$ 150,7 millones a US$ 157,8 millones.
EXPECTATIVA A TOPE
A pesar de que el reciente incremento de capitalización de mercado de diversas empresas en el mundo refleja la confianza de los inversores en su capacidad para acelerar la salida de la crisis, esto no ha sido muchas veces acompañado de un buen desempeño bursátil, lo cual también ha generado decepción por el lado de los inversionistas.
Guillermo Orrillo refiere que en algunos casos se generan expectativas de monetización que finalmente van a tener que cumplirse en algún momento. De allí que sea importante encontrar un equilibrio entre crecimiento de ingresos y capitalización de mercado.
“En la medida en que estas empresas sean capaces de generar ingresos y acompañar las expectativas generadas, lograrán ser saludables. Para ello, el camino que siguen estas 27 empresas que logran el equilibrio entre crecimiento de ingresos y capitalización bursátil es el camino a seguir”, dice.
Para el ejecutivo de Accenture, la crisis global provocada por el COVID-19 deja importantes lecciones y muchas oportunidades para garantizar el crecimiento de las empresas: “A medida que la nueva realidad económica, las presiones comerciales y tecnologías competitivas toman forma, las empresas deben evitar la tentación de volver al pasado. Volver a las estrategias anteriores a la pandemia no dará lugar a un éxito sostenible en los años venideros. En 2021 y más allá, el éxito sostenible vendrá determinado por la forma en que las empresas ejecuten una agenda de cambio diferenciada”, concluye.