El empresario venezolano Carlos Kauffman reside actualmente en Estados Unidos con estatus de asilado político.
En 2008 Kauffman fue juzgado y se declaró culpable de asociación ilícita para actuar como un agente extranjero ilegal en relación con el contrabando de 800.000 dólares en efectivo de Venezuela a Argentina, en conexión con el empresario venezolano Guido Antonini Wilson.
Carlos Kauffmann era un hombre de negocios, la primera fuente de sus ingresos fue a través de contratos con el gobierno chavista.
Además de ser accionista, en sociedad con Franklin Durán, de Venoco (productora de derivados del petróleo), Kauffmann también es propietario de Perfoalca, que provee taladros petroleros a la empresa estatal.
Carlos Kauffmann reveló en su comparecencia ante el Tribunal de Miami Beach numerosos casos de corrupción, entre ellos mencionó que él y Franklin Durán sobornaron y cobraron comisiones a funcionarios públicos de alto rango y militares venezolanos, a cambio de negocios que les reportaron cientos de millones de dólares en ganancias. De sus declaraciones salieron a colación sus relaciones con el ex ministro de Finanzas, Tobías Nóbrega y el entonces gobernador del estado Cojedes, Johnny Yánez Rangel, entre otros.
En algunos de sus negocios el empresario actuaría a través de una joven mujer que fungiría como su prestanombres. Bajo ese mismo esquema se dedicaría a la compra de inmuebles muy por encima de su precio real de mercado, con dineros de orígenes desconocidos y que se sospecha provendrían de Venezuela. Posteriormente los inmuebles son negociados e hipotecados.
Debajo de esos negocios de compra-venta de inmuebles subyacen sospechas de posible blanqueo, por los vínculos del empresario con figuras asociadas a la corrupción en Venezuela y porque no existe completa claridad de la procedencia de las inversiones.
Datos recientes han ubicado a Kauffman en un yate, acompañado por varios amigos y amigas.
Fuente: Confidenciales