La Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) confirmó este viernes que utiliza el software Ufed (por sus siglas en inglés que se traduce a Dispositivo de Extracción Forense Universal), el cual es de tecnología proveniente de Israel y es capaz de hackear teléfonos celulares, computadoras y demás dispositivos para extraer sus contenidos.
En un video de promocional del cuerpo de seguridad se observa cómo los efectivos en cámara describen el funcionamiento del software de la empresa Cellebrite, con filiales en Alemania y Estados Unidos y propiedad de la japonesa Sun Corporation, y cómo en un supuesto caso “ayudó” a recuperar la información de una laptop altamente deteriorada.
El sistema Ufed fue creado para que los investigadores obtengan información de los dispositivos portátiles sin importar que estén borrados, encriptados, destruidos u ocultos en el almacenamiento en la nube.
Hasta ahora no se había comprobado que la Dgcim disponía de tales recursos tecnológicos. El pasado mes de mayo Cellebrite negó haber trabajado con el régimen chavista pese a tener un historial de colaboraciones en el pasado, así fue señalado por el periodista Emmanuel Rondón en el medio El American.
“Cellebrite no ha trabajado con clientes de la defensa o la policía en Venezuela durante varios años y no cambiará su política con respecto al país mientras el régimen actual se mantenga en el poder”, comunicó la empresa luego de varios señalamientos de trabajar directamente con el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
Un periodista del diario israelí Haaretz, Oded Yaron, publicó que “la firma israelí Cellebrite vendió su tecnología de pirateo telefónico al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, a pesar de las sanciones estadounidenses que prohíben las exportaciones al país. Mientras tanto, Cellebrite niega con vehemencia cualquier oferta para vender su nuevo sistema, capaz de permitir que los regímenes ingresen a los teléfonos móviles, a la nación sudamericana”.
Yaron mencionó que “el Cicpc ya tiene lo que parece ser la versión UFED Touch Ultimate, que, según el folleto de ventas, se desarrolló en 2013. En otras palabras, el sistema se vendió al régimen actual o, como mínimo, al de su antecesor, Hugo Chávez, quien falleció en marzo de 2013”. La información recogida apuntó que la policía científica continuó usando este software de piratería en años posteriores.
En la noticia de Haaretz también se recuerda que Maduro dijo repetidas veces en declaraciones públicas y oficiales su intención de comprar el sistema de hackeo desde el año pasado.
Tanto la Dgcim como el Cicpc han sido protagonistas de diversos casos de detenciones arbitrarias, torturas y demás atrocidades contra numerosos presos que están tras sus rejas (en espacial, los de interés político)- Tales violaciones contras los derechos humanos han sido de3nunciadas reiteradas por organizaciones no gubernamentales, partidos políticos de la democracia venezolana, la sociedad civil, entre otros.
No sería la primera vez que Cellebrite está envuelta en polémicas con regímenes autoritarios: “Los mayores escándalos que rodean a Cellebrite se refieren a la venta de tecnología a los regímenes de Bielorrusia y China. También hubo acusaciones, aunque en menor medida, de que la compañía israelí vendió sus dispositivos a Rusia, Turquía y Arabia Saudita”, apuntó El American.
El Gobierno de Israel se ha mantenido en oposición al régimen de Nicolás Maduro, sobre todo desde que tomó la decisión de desconocerlo el 27 de enero de 2019 para recocer como presidente encargado de Venezuela a Juan Guaidó. También, y luego de una década de romper relaciones diplomáticas con la nación caribeña, el rabino Pynchas Brener fue designado por la Asamblea Nacional legítima en agosto de ese año como embajador del gobierno interino venezolano.
