Adicionalmente, la Casa Blanca ha elevado este lunes al máximo nivel de riesgo por el coronavirus a países como Chipre, Portugal, Kirguistán o Cuba
Estados Unidos ha vuelto a recomendar “no viajar” a España debido al empeoramiento de la pandemia, que ha llevado a las autoridades estadounidenses a situar al país en el máximo nivel de riesgo.
“No viaje a España debido al COVID-19”, recoge un aviso de viaje emitido este lunes por el Departamento de Estado, de acuerdo a una alerta enviada por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
En concreto, las autoridades estadounidenses han subido a España al “nivel 4”, el máximo, por el riesgo “muy alto” del coronavirus en el país.
El Departamento de Estado ha llamado también a actuar con “mayor cautela” en España “debido al terrorismo y los disturbios civiles”.
Además de España, Estados Unidos ha elevado este lunes al máximo nivel de riesgo por el COVID-19 a países como Chipre, Portugal, Kirguistán o Cuba.
Asimismo, ha incluido en el “nivel 3” de riesgo a Israel, Armenia, Croacia o Hungría, en distintos avisos en los que insta a “reconsiderar” el traslado a estos países por la pandemia o restricciones relacionadas con la misma.
Según el informe publicado este lunes por el Ministerio de Sanidad de España, la incidencia acumulada a 14 días se sitúa en los 700,10 casos por cada 100.000 habitantes, en comparación con los 677,67 notificado el viernes pasado por el departamento dirigido por Carolina Darias.
Estados Unidos mantendrá las actuales restricciones de viaje para entrar en su territorio ante los aumentos de los contagios con la variante delta del coronavirus, que en el caso de este país ha provocado un fuerte aumento de los casos.
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, confirmó este lunes que la intención del Gobierno que preside Joe Biden es la de mantener las actuales restricciones.
Psaki recordó que la variante delta se está extendiendo en el país y en el resto del mundo, y en el caso de Estados Unidos ha provocado una nueva ola que afecta sobre todo a las personas no vacunadas, y que esperan continúe en las próximas semanas.
Por otro lado, Psaki consideró normal que las autoridades sanitarias del país mantengan una discusión “activa” sobre las medidas a tomar, incluida la posibilidad de volver a reclamar el uso de la mascarilla en interiores, después de que el principal epidemiólogo del Gobierno, Antony Fauci, admitiera que se está sopesando esa posibilidad.
En cualquier caso, recalcó que el Gobierno tomará las decisiones según las recomendaciones de sus responsables científicos y sanitarios, siempre con arreglo “a los datos” y no como una decisión política.
Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) establecieron en mayo que la población completamente vacunada en Estados Unidos podía permanecer sin mascarilla la mayoría del tiempo, incluso si está en espacios cerrados o con un grupo numeroso de gente.
Europa Press