Freddy Superlano Salinas nació en el estado venezolano de Barinas en 1976. Su vínculo con la política comenzó desde muy joven, pues sus padres fueron activistas del partido Acción Democrática, tolda en la que dio los primeros pasos él también como secretario juvenil. En aquellos tiempos, también dedicaba su tiempo a los estudios superiores y se graduó como Ingeniero en Sistemas y licenciado en Educación, mención Geografía e Historia.
En 2004, con 28 años, se separó de la política, pero la ausencia duró poco. Tres años después, Superlano se unió a la asociación civil Redes Ciudadanas, donde conoció a Leopoldo López y, tras conseguir afinidad en la política, se unió a las filas de Voluntad Popular cuando el partido nació en 2009. Desde entonces se desempeñó como coordinador regional del partido VP en el estado Barinas.
En 2015 Superlano fue electo diputado a la Asamblea Nacional de Venezuela para el periodo 2016-2021. Durante el primer año de gestión, formó parte de la Comisión Permanente de Desarrollo Social Integral, y en 2017 la Comisión Permanente de Cultura y Recreación.
En 2018, fue elegido en plenaria como presidente de la Comisión Permanente de Contraloría de la Asamblea Nacional, cargo al que renunció finalmente el 30 de noviembre de 2019 en medio de acusaciones de irregularidades en el «caso Cúcuta» con dineros de la ayuda humanitaria, y justo antes de que se publicara un reportaje periodístico en el que se devela que integrantes de esa instancia generaron cartas y documentos exculpatorios en favor de Carlos Lizcano, propietario de la compañía Salva Foods 2015 y relacionado con los empresarios Alex Saab y Álvaro Pulido.
Todavía existen sospechas sobre que Superlano pudo haber recibido sobornos de Alex Saab para engavetar investigaciones contra el empresario colombiano, pero también de otros empresarios, algunos de ellos asesores financieros venezolanos radicados en República Dominicana, que han participado en gigantescas operaciones financieras con dineros estatales de Venezuela. Estos mismos financieros han abogado a favor de Superlano ante la prensa frente a escándalos en los que se ha visto implicado el exdiputado.
Freddy Superlano, estuvo inmerso en un bochornoso incidente el 22 de febrero de 2019, cuando la prensa colombiana denunció que en «una noche de tragos y excesos» con «prepagos» falleció su asistente en la víspera del frustrado ingreso de ayuda humanitaria a Venezuela.
Su equipo de prensa informó vía Twitter que los dos se encontraban el fin de semana en Cúcuta (Colombia) «para apoyar el ingreso de ayuda humanitaria», cuando «Superlano fue intoxicado» junto a su primo Carlos Salinas.
A diferencia de su primo, quien murió, el legislador se recuperó tras ser hallado en el motel Penélope en grave estado de salud. Pero la información no se conoció por su partido, Voluntad Popular, sino gracias a la policía de Colombia, que desmintió la versión de “envenenamiento”.
Jorge Rodríguez, entonces ministro de Comunicación de Maduro, publicó un video en el que presuntamente se aprecia a Superlano en compañía de dos prostitutas que habrían robado al diputado y a Salinas 250.000 dólares.
Venezuela es mi prioridad: Ayer solicité iniciar una investigación a la Comisión de Contraloría para responder a los diferentes señalamientos. Por no poder ejercer a cabalidad la responsabilidad ante mi exilio, tome la decision de separarme del cargo de Pdte. de dicha comisión. pic.twitter.com/0X5L74A87h
— Freddy Superlano (@freddysuperlano) December 1, 2019
La investigación sobre presunta corrupción asociada a los CLAP comenzó en 2017 en el parlamento venezolano. No obstante, en 2018 están fechadas unas cartas con autenticidad incierta que absuelven de irregularidades a Álex Saab, firmadas por diputados opositores. Superlano ha negado que el documento sea legítimo.
En 2019 el diputado José Brito Brito solicitó que se investigara a los presidentes de la Comisión permanente de Contraloría de la Asamblea Nacional desde 2016 (Freddy Guevara, Juan Guaidó y Freddy Superlano, todos miembros del partido Voluntad Popular) pues «cada uno de ellos ordenaron y firmaron oficios, exonerando de responsabilidad a empresarios investigados en esta instancia (…) Sin embargo ninguno de ellos fue procesado ni investigado por esas razones».
