“Una buena mamografía no genera dolor, no rompe prótesis y es un estudio radiológico que utiliza una dosis baja de radiación. Además, la toma de imágenes mamarias permite el diagnóstico temprano y preciso de la patología mamaria lo que ayuda a superar los riesgos. De allí deriva la importancia de escoger un centro como Policlínica Metropolitana que invierte en tecnología y destaca por la excelencia de su personal médico”, así lo explicaron Hildamari Atienza, coordinadora de TAC y resonancia de PCM; Analisa Careddu, coordinadora de radiología y ultrasonido; y la coordinadora del servicio de Mamografía de esa institución, Anamaría Rooks, durante un live en el que destacaron la importancia de realizarse estudios de calidad para detectar a tiempo el cáncer de mama.
“La mamografía de la Policlínica Metropolitana se hace cumpliendo los controles de calidad y la dosis de radiación está dentro de los valores aceptados en las guías internacionales. . Además, nuestros equipos, al ser de última generación, nos permiten ofrecer un diagnóstico precoz y detectar alteraciones que no superan el centímetro”, explicó Careddu.
Las especialistas de PCM explicaron que el autoexamen mensual, aunque le permite a cada mujer conocer sus mamas y saber cuándo hay un cambio en ellas, no puede sustituir el control anual, porque la mamografía detecta lesiones de forma temprana e imperceptibles a los sentidos, permitiendo un mejor abordaje en caso de diagnosticarse cáncer de mama. Explicaron además que la mayoría de los veces, más no en todos los casos, sumar un eco mamario hace más certero el resultado.
Agregaron que “no importa a qué grupo pertenezco, qué raza tengo, todas nosotras, todas nos beneficiamos del control periódico porque podemos lograr una detección temprana, que es en donde podemos impactar y cambiar el pronóstico, el tratamiento”.
Reiteraron que las mujeres deben hacerse la mamografía anualmente a partir de los 35 años en adelante y recordaron que una de cada 3 mujeres mayores de 70 años padecerá cáncer de mama, por lo que insisten en que las pacientes luego de esa edad deben seguir en control.
En el caso de los pacientes de riesgo (por factor genético) se les recomienda hacerla anualmente a partir de los 30 años de edad o 10 años antes del diagnóstico del último familiar con la enfermedad.
Recordaron que 1% de los casos de cáncer de mama se diagnostica a hombres por lo que los llamaron a prestar atención a sus mamas, principalmente si han percibido síntomas como sangrado/bultos o tienen antecedentes familiares con cáncer de mama.