El revuelo causado por la fiesta de cumpleaños de un empresario turístico vinculado al régimen venezolano en la cima del Tepuy Kusari reveló además una apretada agenda social de la nueva oligarquía chavista cuyos escenarios son las cimas de los tepuyes milenarios. El siguiente evento, una boda, estaba planificada para celebrarse en la cima del Auyantepuy, a escasa distancia de la caída del majestuoso Salto Ángel.
Jaime Garvett | Primer Informe
La indignación causada dentro y fuera de Venezuela por la información que en exclusiva publicó Primer Informe sobre la fiesta con más de 30 personas que el empresario Rafael Oliveros ofreció por su cumpleaños en lo alto Tepuy Kusari, reventó las redes sociales y los medios de comunicación.
Las revelaciones de Primer Informe provocaron una avalancha de comentarios de personalidades del mundo ambiental y académico, así como del público en general. También provocó que algunos de los participantes en el evento de Kusari intentaran borrar las huellas de su «aventura» antes publicadas en sus redes sociales.
Sin embargo, la actividad a la que asistieron algunos personajes reconocidos de la farándula y las relaciones públicas de la capital del país, fue una más de las que suele hacer el Grupo La Marea en el tepuy y en otros lugares sagrados del área.
Este evento, sin embargo, no es el único en la apretada agenda social de la nueva oligarquía vinculada a la dictadura de Nicolás Maduro. De acuerdo a fuentes familiarizadas con las operaciones turísticas en la llamada Gran Sabana, más eventos están en la lista para celebrarse en lugares como la cima del Auyantepuy, donde se origina la caída de agua mas alta del mundo, el Salto Angel.
Una boda en el Auyantepui
Osmel Sousa, uno de los invitados al convite celebrado en la cima del Kusari, adelantó en su cuenta de Instagram, en un post acompañado por Olivares en un restaurant caraqueño de su propiedad, sobre el supuesto nuevo evento: la boda de la ex miss Venezuela Mundo, Gabriella Ferrari.
Del encuentro de Sousa con Ferrari en el restaurant de Olivares, trascendió que la boda de la ex modelo estaba pautada para ser en el tepuy más alto de la Gran Sabana, el Auyantepuy.
En primer plano, la ex miss Venezuela Mundo, Gabriella Ferrari, enseñando su anillo de compromiso a Osmel Souza, en un video que el llamado «zar de la belleza» compartió en su perfil de Instagram. Ambos se encontraron en el restaurant White, de Rafael Olivares.
Ferrari planea nupcias con el hijo del empresario Werner Braschi, quien no posee un perfil mediático pero sí tiene historia dentro del régimen de Nicolás Maduro. El empresario del sector construcción está asociado a la Constructora CBA desde 2015. Además, según la página de análisis de negocios SEAIR, Braschi también está en el negocio de realizar importaciones desde Venezuela.
Braschi es conocido también por figurar en una demanda desestimada a Eligio Cedeño en los Estados Unidos. El ex banquero venezolano presentó acusaciones en el distrito sur de Nueva York contra «un grupo de personas y entidades, muchas de ellas asociadas con el Gobierno venezolano, de tenerlo en prisión de forma injustificada por casi tres años en Venezuela y de dañar a su empresa, Cedel International Investment Ltd., con sede en las Islas Vírgenes». Braschi estaba en la lista de los acusados, junto a otros personajes de la alta jerarquía chavista como Pedro Carreño e Isaías Rodríguez, entre otros.
El Auyantepuy es reconocido por sus 2.535 metros de altitud y su vasta superficie de 70.500 hectáreas, que es comparable al terreno del principado de Andorra. Desde su cima cae la cascada más alta del mundo, llamada Kerepakuai Vená, también conocida como Salto Ángel.
El comunicado sobre la fiesta en el Tepuy Kusari, emitido por la Organización SOS Orinoco, señala que «realizar una gran fiesta, boda o celebración privada, en cualquier sitio del Parque Nacional Canaima, Sitio de Patrimonio Mundial Natural, es considerado una falta de respeto hacia la cultura pemón, ya que todos los tepuyes son considerados sagrados por el pueblo Pemón».
Según las fuentes de Primer Informe, la boda en el Salto Ángel estaba programada para celebrarse en el próximo mes de marzo. La producción del evento está a cargo del mismo equipo dirigido por Olivares. La información ya encendió las alarmas de las organizaciones ambientalistas ante lo que podría representar, además de un ecocidio, un irrespeto a las comunidades autóctonas indígenas de la zona.
Mientras tanto, el daño al frágil ecosistema de estos milenarios tepuyes, que forman parte del Patrimonio Mundial Natural designado por la UNESCO en 1994, continúa sin que se señalen responsabilidades. La concesión turística que controla el negocio en el Parque Nacional Canaima no es la única que controla el Grupo La Marea. También administran concesiones de otros paraísos turísticos en Venezuela como Playa El Agua y la Isla La Tortuga.
En la mañana del miércoles 10 de febrero, un día después de que se viralizara la fiesta en el Tepuy Kusari, el ministerio público chavista se pronunció sobre el caso. Tarek William Saab, quien ejerce como fiscal general del régimen de Maduro, dijo que abrió una investigación por «los daños causados al parque nacional Canaima (Tepuy KUSARI) como consecuencia de una ‘fiesta’ organizada en dicho lugar por una empresa y un grupo de personas».
