El menor, que fue liberado la semana pasada en Cali, estuvo 10 días en poder de sus captores, quienes lo amenazaban con asesinarlo o venderlo a la guerrilla
El pasado 24 de agosto inició el horror para el joven José Manuel Velasco Isaza. Sobre las 6:00 pm. se desplazaba con su mamá y su hermana de 12 años en una camioneta por la vía que conduce de Palmira a Cali, cuando un grupo de delincuentes los interceptó y se llevó el vehículo con el adolescente a bordo.
El joven había salido del Instituto Municipal del Deporte y la Recreación de Palmira donde practicaba patinaje. Allí lo recogió su familia, oriunda del municipio de Ginebra, para desplazarse de regreso a la casa, cuando ocurrieron los hechos.
La familia se desplazaba en una camioneta tipo Duster de color vinotinto, cuando, a escasos 15 minutos de la capital vallecaucana, fueron alcanzados por dos hombres a bordo de una motocicleta. Los delincuentes obligaron a las dos mujeres a descender y huyeron, presuntamente con destino al sector de Candelaria, con el vehículo y el niño en su interior.
Tan pronto se reportó el secuestro, las autoridades dispusieron un plan candado y el Gaula de la Policía inició la búsqueda. El vehículo había tomado rumbo desconocido y se presumía que retuvieron al menor, amarrándolo para evitar que escapara, con fines extorsivos.
Mientras las autoridades pedían la liberación del joven sano y salvo, los delincuentes habrían exigido la suma de 350 millones de pesos a la familia por su libertad. Las autoridades no reportaron que los padres del menor hubieran recibido amenazas con anterioridad.
A los tres días del secuestro, cientos de habitantes de Ginebra realizaron una velatón en el municipio para exigir la liberación del menor, mientras las autoridades ya estaban tras el rastro de los delincuentes. Pero mientras tanto, el joven y su familia vivían momentos de terror.
Noticias Caracol reveló los mensajes que los captores de José Manuel Velasco enviaban a la familia para extorsionarlos. A través de chats de WhatsApp, los delincuentes amenazaban con asesinar al menor si no les entregaban la suma de 230 millones de pesos.
Al parecer, los criminales se comunicaban al teléfono de la abuela del niño. En uno de los mensajes le enviaron un video para que se diera cuenta que “no era un juego”. “Oiga bien lo que le voy a decir, si usted no se busca los 230 millones de pesos se va a morir su nieto”, la amenazaban.
La mujer manifestó que no tenía formas de conseguir esa cantidad de dinero, pero los secuestradores continuaron con sus amenazas. “Busque maneras porque su pelado se va a morir. Ya no tenemos ganas de venderlo a la guerrilla, sino de matarlo”, le sentenciaron.
A la par de las amenazas, la esperanza estaba en el actuar de las autoridades. El Gaula había desplegado un equipo para establecer el camino que pudo tomar la camioneta robada. Con los registros de cámaras de seguridad y testimonios, llegaron hasta el barrio El Guabal, al sur de la capital del Valle del Cauca.
EL RESCATE DE JOSÉ MANUEL VELASCO
De acuerdo con el diario El País, el grupo antisecuestro de la Policía estableció cuatro viviendas como las posibles guaridas de los delincuentes y el lugar donde estaba José Manuel, solicitaron los permisos de allanamiento y realizaron el operativo.
El pasado 3 de septiembre, las autoridades ingresaron de manera simultánea a dos inmuebles, ubicados en la calle 16 con carrera 41, barrio San Judas, de Cali. En uno de ellos, en una habitación y solo estaba el adolescente acostado en una cama. En la vivienda fueron capturados una mujer y un hombre, quienes son acusados de custodiar al menor.
En otra de las viviendas fue capturada una tercera persona, que ha sido identificada por las autoridades como alias Christoper, quien es señalado como el cabecilla de la banda delincuencial que realizó el secuestro y coordinó la extorsión.
“Gracias al heroísmo de nuestra Policía Nacional ha sido rescatado sano y salvo el niño Juan Manuel Velazco, quien había sido secuestrado en el Valle del Cauca hace 11 días. Han sido capturados tres bandidos en flagrancia. El que la hace la paga y siempre con convicción contra el crimen”, expresó el presidente Iván Duque.
El líder de la banda delincuencial conocida como “Los de Maracaibo”, quienes realizaron el crimen, fue identificado como Christoper Levis Morales Orozco, alias ‘Christoper’. En la vivienda donde fue capturado se encontró una sábana que habían utilizado de telón de fondo para un video como prueba de la retención del niño.
Los demás detenidos fueron Isabel Cristina Escobar Hincapié, alias ‘Isa’ y Luis Alberto Perea, compañero sentimental de la primera señalada. En los allanamientos también se encontraron seis teléfonos celulares que habrían sido usados para realizar la extorsión. De acuerdo con la Fiscalía seccional de Cali, tras la captura de alias Christoper, se logró ubicar y recuperar la camioneta hurtada a la familia del menor.
Los tres capturados fueron presentados al Juzgado 26 Penal con función de control de garantías, ante el cual un fiscal especializado les imputó presunta responsabilidad en los delitos de secuestro extorsivo agravado en concurso heterogéneo con hurto calificado y agravado; fabricación, tráfico y porte de armas de fuego, accesorios, partes, y municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos.
Pese a que ninguno aceptó los cargos, al término de las audiencias, el juez dispuso el traslado de los dos hombres a la cárcel de Villahermosa, mientras ordenó la reclusión de la mujer en el pabellón de mujeres de la cárcel de Jamundí (Valle del Cauca).