La historia reciente de la aerolínea venezolana Rutaca está marcada por un cúmulo de misterios, escándalos legales e incidentes que han tejido una red de intrigas en torno a la compañía. Su crecimiento en la última década, en un país golpeado por la crisis, ha estado íntimamente ligado a figuras poderosas, alimentando aún más las especulaciones sobre su ascenso.
Los orígenes de la aerolínea se remontan al año 1971, cuando el piloto Eugenio Molina Anaya y su suegro, Evar Mares Bianchi, fundaron Tucán Helicóptero, C.A. La empresa, cuyo nombre cambiaría en 1974 a Rutas Aéreas, C.A. (Rutaca), se convertiría en un nombre conocido en la aviación venezolana.
En el primer trimestre de 2012, en una reunión familiar, Eugenio Molina Anaya y los herederos de Mares Bianchi, convertidos ya en accionistas de Rutaca, decidieron incluir a un nuevo socio en la empresa, ante la inminente jubilación de algunos de ellos. El 14 de junio de ese año, se concretó la venta del 90% de las acciones de la aerolínea a Carlos Alberto Silva Caraballo, un exlanzador de Grandes Ligas, nacido en el estado Bolívar, cuna de Rutaca en Venezuela. Silva, quien había tenido un paso fugaz por equipos como los Marineros de Seattle, Mellizos de Minesota, Philadelphia Phillies y Chicago Cubs, se vio obligado a retirarse del béisbol profesional en 2011 tras una lesión en el hombro.
En 2012, Silva regresó a Venezuela y fue fichado por Caribes de Anzoátegui, un equipo de béisbol presidido por Rafael Gruszka Tress. Gruszka Tress, un ingeniero civil y empresario con intereses en el sector de la construcción, había sido presidente del Fondo de Desarrollo Urbano (Fondur) en 2002, cargo que le valió una investigación por presuntos actos de corrupción años después por parte de la Asamblea Nacional venezolana.
Para la fecha de la venta de Rutaca, Eugenio Molina mantenía una estrecha relación con Rafael Ciarcia, un empresario con intereses en el estado Anzoátegui, Venezuela. Entre 2011 y 2014, Molina y Ciarcia fueron socios en 397 Flight Services, Inc., una empresa con sede en Florida.
Las conexiones de Carlos Silva: del béisbol a la cima de Rutaca
Carlos Silva, en el momento de adquirir la aerolínea Rutaca, ya había forjado una estrecha relación con Francisco Rangel Gómez, quien en aquel entonces era el gobernador chavista del estado Bolívar. El 5 de febrero de 2011, el beisbolista organizó un Festival de Jonrones para beneficiar a los niños de las barriadas de Ciudad Guayana, en el estado Bolívar. Este evento contó con la participación de renombrados peloteros venezolanos como Bob Abreu, Magglio Ordóñez, Miguel Cabrera, José Castillo y Carlos Zambrano. Silva anunció personalmente este evento en enero de 2011, durante el programa radial de Rangel Gómez.
Además, Silva no se mantuvo al margen de la política. Entre 2012 y 2013, asistió a actividades del mandatario Nicolás Maduro en los estados Bolívar y Anzoátegui.
Con todos los hierros
En lo que respecta a los negocios, una correspondencia interna de CVG Ferrominera del Orinoco, la estatal venezolana que comercializa hierro, revela que el 11 de octubre de 2012, Gabriell Faleni, gerente de Comercialización de la estatal, aceleró una compra de vehículos a JG 52 International, LLC. Se trataba de una empresa de maletín creada por Carlos Silva en Florida el 21 de enero de 2011. La dirección personal que Silva utilizó para registrar JG 52 International LLC fue 3109 GRAND AVENUE, PMB 447, MIAMI FL 33133, que corresponde a un casillero de una tienda postal en Florida. La dirección de la empresa, ahora inactiva, 1817 MICANOPY AVENUE MIAMI, FL 33133, se encuentra en un vecindario residencial, nada parecido a un lugar donde pudiera operar un distribuidor de automóviles.
La dirección 3109 GRAND AVENUE, PMB 447, MIAMI FL 33133 también fue utilizada el 21 de noviembre de 2013 por Luis Silva y Zulibell Silva Caraballo, hermanos del beisbolista Carlos Silva, para registrar la sociedad RUTAS AEREAS, LLC, una subsidiaria de la venezolana RUTAS AÉREAS, C.A. (Rutaca), de la cual Carlos Silva es propietario.
Retomando el tema de la negociación, los documentos revelan que se justificaba un acuerdo entre Ferrominera y la empresa de Carlos Silva. Radwan Sabbagh, quien en ese momento presidía CVG Ferrominera del Orinoco, aparece en estos documentos.
El acuerdo implicaba la compra de 110 vehículos, con un costo estimado, según los documentos, de diez millones 900 mil dólares. Esto se traduce en un promedio exorbitante y sobrevalorado de más de 99,000 dólares por vehículo.
Sin embargo, el acuerdo se vuelve aún más sospechoso cuando, en lugar de un cheque por la cantidad acordada, la empresa del deportista Carlos Silva, solicitó que se le pagara con 140 mil toneladas de hierro. JG 52 International LLC recibiría este hierro en dos embarques de 35 mil toneladas cada uno, además de otros cuatro embarques en buques tipo Panamax.
Los documentos también detallan el lugar de carga (Puerto Ordaz), aunque no su destino. De esta manera, la empresa de suministros del beisbolista ya no era simplemente un proveedor de camionetas y automóviles, sino algo más inaudito: una revendedora de hierro.
El decreto de nacionalización de la industria del hierro, promulgado en 1976 por el entonces presidente Carlos Andrés Pérez, y las leyes subsiguientes que establecieron el control estatal de esta industria, otorgan a Ferrominera Orinoco la exclusividad en la extracción, procesamiento y comercialización del mineral de hierro en Venezuela. Incluso se especifica que Ferrominera, la empresa creada para este propósito, solo debe vender mineral a clientes finales, tanto dentro como fuera del país, y nunca a través de intermediarios.
Días después de cerrar el trato, el beisbolista Carlos Silva, en su papel de representante de JG 52 International, envió una carta al auditor de CVG Ferrominera del Orinoco. En la misiva, adjuntó la documentación que acredita el suministro de 60 camionetas Ford4x4 Doble Cabina, 40 Camionetas Ford 4×4 Cabina Sencilla y 10 Camionetas Vans Passinger. Los costos de nacionalización de estos vehículos se estimaron en más de un millón de dólares.
La negociación, que sorprendió a muchos, comenzó a tomar forma en el sistema interno de CVG Ferrominera del Orinoco. Katerine Reyes, una funcionaria de CVG, se encontraba bajo la presión de los directivos de la empresa privada y de Ferrominera para acelerar el contrato. En respuesta a esta presión, el 26 de noviembre de 2012, envió un correo electrónicoa Silva: “De acuerdo a su solicitud se generó el pedido 4110013185, el cual se encuentra liberado por todas las estrategias a nivel de sistema SAP, ahora bien, y como se lo indicamos en email previos para la obtención de las firmas en físico de dicho pedidos de compras, quedamos a la espera de la Junta Directiva Correspondiente, por tratarse de una adjudicación directa”.
El correo electrónico revela que la negociación se llevó a cabo sin licitación, bajo las órdenes de la alta dirección de Ferrominera, liderada por Radwan Sabbagh. Solo ellos tenían la responsabilidad de transformar al beisbolista Carlos Silva, primero en vendedor de camionetas y luego en revendedor de hierro.
Posteriormente, el 12 de junio de 2013, Sabbagh fue arrestado por actos de corrupción en Ferrominera del Orinoco. El presidente Nicolás Maduro, refiriéndose a Radwan Sabbagh, comentó: “es inaceptable que se le dé a esta gente, a un funcionario, que se le dé toda la confianza pública y termine haciendo negocios con las empresas que le pertenecen al pueblo de Venezuela”.
«Estafa continuada»
En junio de 2012, Eugenio Molina y sus socios, creyendo que estaban realizando la transacción de sus vidas, vendieron el 90% de las acciones de Rutaca al beisbolista Carlos Silva. Esta venta se realizó en medio de supuestas amenazas de expropiación estatal de la aerolínea. Sin embargo, la realidad de la transacción resultó ser otra.
A principios de 2014, Molina y los demás vendedores intentaron notificar formalmente a Carlos Silva sobre su incumplimiento de pago. No obstante, Silva se negó a recibir y firmar dicha notificación.
Ante esta situación, Molina y los demás accionistas de Rutaca acusaron penalmente a Carlos Silva de «estafa continuada». Según ellos, en una asamblea general extraordinaria de accionistas de la aerolínea, celebrada el 26 de septiembre de 2012 y presentada ante el Registro Mercantil de Ciudad Bolívar, estado Bolívar, se formalizó una operación de compraventa que no coincidía con los montos acordados. Además, el acta estaba acompañada por cheques firmados por Carlos Silva, de una cuenta perteneciente a su hermano Luis Alberto Silva, quien se había convertido en el presidente ejecutivo de Rutaca. Esto hacía imposible que los vendedores de las acciones pudieran cobrarlos.
De acuerdo con el expediente del caso, el 14 de febrero de 2014, en una asamblea ordinaria de Rutaca, Carlos Silva diluyó el capital social de la empresa a unos accionistas desconocidos, violando las normas aeronáuticas y el convenio original de compra-venta.
Después de la dilución de las acciones, el capital quedó en 27.500.000 bolívares. Carlos Alberto Silva Caraballo poseía 900.000 bolívares, con un capital de 90.000 acciones. Eugenio Molina Anaya tenía 10.000 acciones con un capital de 100.000 bolívares y el enigmático Grupo Gobain Services poseía 2.650.000 acciones, equivalentes a un capital de 26.500.000, tras ejecutarse la irregular dilución de acciones.
En 2014, la junta directiva de Rutaca fue renovada, quedando conformada por Luis Alberto Silva Caraballo (hermano de Carlos Silva), Fernando José Yibirín Rengel, Milagros Tabbouli, Carlos Muñoz Campos y Gustavo Ernesto Mendiri Borges, este último un personaje clave en esta historia.
El caso de estafa, después de pasar por tribunales ordinarios en Caracas, fue resuelto en la Sala de Casación Penal del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela. El 5 de agosto de 2016, se decretó el sobreseimiento de la causa contra Carlos Silva, argumentando que el Ministerio Público había solicitado el sobreseimiento y que el caso debía ser llevado ante tribunales civiles y no penales.
En definitiva, Molina y los socios originales de Rutaca solo habrían recibido 2 millones de dólares, de la oferta de 10 millones, por una aerolínea cuyo costo algunos expertos estimaban entre 25 y 30 millones de dólares.
Personajes clave en la nueva etapa de Rutaca
Gustavo Ernesto Mendiri Borges, un abogado que se convirtió en directivo de la aerolínea Rutaca, comenzó su carrera en la gestión deportiva al menos desde 2008. A la temprana edad de 27 años, ya ocupaba el cargo de gerente de operaciones del equipo de béisbol Caribes de Anzoátegui, coincidiendo con la presencia del beisbolista Carlos Silva en ese mismo club en 2009. Posteriormente, Mendiri ocupó una serie de puestos gerenciales en diversas organizaciones deportivas, como el equipo de baloncesto Guaiqueríes de Margarita y el equipo de fútbol profesional Monagas Sport Club. En 2013, se unió a la Liga Profesional de Baloncesto (LPB) de Venezuela como tesorero, cargo que mantuvo hasta 2019.
Carlos Silva y Gustavo Mendiri también se asociaron para adquirir la aerolínea La Venezolana, aunque este emprendimiento parece haber fracasado.
Una fuente del sector aeronáutico sugirió que Gustavo Mendiri Borges podría estar relacionado, por parte de su padre, con los hermanos Mendiri, un grupo de cuatro antiguos pilotos de aerolíneas comerciales. Dos de ellos, Pedro y Gustavo, eran pilotos de la aerolínea Avensa y murieron en un accidente automovilístico en 1969. Otro de los hermanos, el capitán José Antonio Mendiri, también trabajó en Venezuela en las aerolíneas Avensa y Santa Bárbara Airlines, antes de unirse a la panameña Copa Airlines, previo a su jubilación. El cuarto hermano, Rafael Mendiri Herrera, que enfrentó serios problemas de salud en 2021, trabajó en Avensa, Santa Bárbara Airlines, Rutaca y Estelar. Sin embargo, la fuente sugirió que Gustavo Mendiri Borges quizás no mantuvo una relación muy cercana con sus parientes paternos y que algunos familiares de los hermanos pilotos Mendiri Herrera residían en los estados Bolívar y Anzoátegui.
En enero de 2012, pocos meses antes de la negociación de compra-venta de la aerolínea Rutaca, el abogado Gustavo Mendiri Borges parece haber iniciado una cruzada para hacerse con activos que anteriormente pertenecían a José Zambrano Lucero. Estos incluían el equipo de baloncesto profesional venezolano Marinos de Anzoátegui y la aseguradora Zuma Seguros.
Zambrano había caído en desgracia en Venezuela después de que su banco, Banorte, fuera intervenido en 2009 y de emitirse una orden de captura en su contra.
Una vez finalizada la compra en enero de 2012, Carlos Silva comenzó a aparecer como propietario del equipo de baloncesto Marinos de Anzoátegui y Mendiri como presidente de ese equipo deportivo. Posteriormente, en 2013, Mendiri alternó entre varios puestos, incluyendo vicepresidente y tesorero de Marinos de Anzoátegui, aunque en otros momentos volvió a asumir la presidencia del equipo. «En parte lo hice por Gustavo Mendiri, el presidente del equipo, porque es como mi hermano. Pasó por un momento difícil con Caribes de Anzoátegui y quería darle una oportunidad de salir adelante. La idea de comprar a Marinos nació de él (de Mendiri)», confesó Carlos Silva en una entrevista en junio de 2012.
Además, Gustavo Mendiri se desempeñó simultáneamente como presidente del club de fútbol de primera división Monagas Sport Club durante la temporada 2013-2014.
En diciembre de 2015, se supo también que Carlos Silva había adquirido el club de fútbol Deportivo Anzoátegui.
Posteriormente, Gustavo Mendiri se involucró en una disputa con Ciro Enrique Amesty Rodriguez, entonces presidente de Zuma Seguros, por el control de esa aseguradora. Ciro Amesty no estaba satisfecho con el pago ofrecido por Mendiri por la compra de su parte en la compañía de seguros, en un caso que llegó a los tribunales venezolanos en 2016. Sin embargo, ese mismo año, Gustavo Mendiri logró convertirse en vicepresidente de Zuma Seguros, nombrando a Renny Calderín como su secretario. En ese momento, Jesús Antonio Camargo Morillo, quien antes había sido vicepresidente de la aseguradora, pasó a ser presidente de la misma. Pero esa situación cambió en 2019, cuando Gustavo Mendiri se convirtió en presidente de la aseguradora y Renny Calderín en vicepresidente. Sin embargo, en otro giro de los acontecimientos, en mayo de 2023, Jesús Antonio Camargo regresó a la vicepresidencia de Zuma Seguros, tras la salida de Renny Calderín de ese puesto. Calderín había sido entre 2008 y 2009, gerente general del equipo de béisbol Caribes de Anzoátegui, del que Mendiri también era gerente de operaciones.
En 2010, Gustavo Mendiri Borges y Renny Calderín habían abandonado la gerencia del equipo Caribes de Anzoátegui. Ese mismo año, Mendiri, también conocido como «El Flaco», fue invitado a comentar un partido de béisbol en las instalaciones militares del Fuerte Tiuna, en Caracas, donde participó el entonces presidente Hugo Chávez.
En 2016, mientras Mendiri intentaba tomar el control de Zuma Seguros, Ciro Amesty fue arrestado y acusado de una supuesta estafa en la venta de acciones de la aseguradora. Amesty también enfrentó problemas legales por discrepancias contables en su compañía Venezolana Internacional De Fianzas, Interfianzas, C. A. No está claro si Mendiri utilizó sus contactos en el sistema judicial venezolano para ejercer alguna forma de presión contra Amesty.
No se sabe con certeza de dónde provino el dinero que permitió a Mendiri convertirse en accionista de Zuma Seguros en 2016. Sin embargo, es evidente que Mendiri ya había comenzado a relacionarse con individuos vinculados a actos de corrupción en la Faja Petrolífera del Orinoco.
En septiembre de 2015, Mendiri estableció una asociación en República Dominicana con Nabetse Del Valle Vásquez Gómez, en una empresa llamada Mendiri-Vasquez Petroleo RD. En agosto de ese mismo año, había registrado Inversiones Mendiri Vasquez, otra empresa en la que aparecía como único titular, también en República Dominicana. En julio de ese año, Mendiri y Vásquez se fotografiaron juntos en República Dominicana, junto a Pedro Chalas, hijo del presidente del equipo de baloncesto dominicano Soles del Este. En ese encuentro, que buscaba un acercamiento entre Marinos de Anzoátegui y el equipo dominicano, Nabetse del Valle Vásquez Gómez fue presentada como «Nabe Vásquez». A Vásquez se le ha llegado a identificar como «sobrina», «hermana de crianza» o «testaferro» de Pedro León Rodríguez, quien fue director ejecutivo de la Faja Petrolífera del Orinoco en Venezuela y es uno de los nombres más destacados en las tramas de corrupción dentro de la industria petrolera venezolana. Un año después de la visita de Mendiri y Vásquez a República Dominicana, Vásquez y su exmarido, Pedro Luis García Ramos, fueron acusados de tráfico de drogas, después de que agentes de la Guardia Nacional Bolivariana encontraran dos kilogramos de cocaína en el yate OPEN BAR, Matricula D-L9517-AF, propiedad de la pareja. Vásquez y García amasaron una fortuna como contratistas privilegiados de la Faja Petrolífera del Orinoco.
A pesar de la detención del antes director ejecutivo de la Faja, Pedro León Rodríguez, en 2017, las relaciones comerciales de Gustavo Mendiri en la Faja Petrolífera del Orinoco no parecen haberse visto afectadas. Con la incorporación de Mendiri como accionista en 2016, Zuma Seguros amplió sus servicios al sector petrolero. Por ejemplo, en octubre de 2018, proporcionó «servicios de equipos de pruebas de producción y evaluación de pozos productores» a la compañía Petrogas Supply & Services, C.A. Entre marzo de 2019 y 2020, obtuvo un contrato para un «servicio de alquiler de taladro para la perforación de pozos» con la empresa Petrovictoria, una entidad conjunta entre Pdvsa y la rusa Rosneft, y la empresa Taladro Holdings Venezuela, C.A.
Surge la pregunta de si fue a través de negocios oscuros en la Faja Petrolífera del Orinoco que Gustavo Mendiri pudo obtener el capital necesario para convertirse en accionista de Zuma Seguros.
En medio de esta prosperidad, Mendiri pasó de vivir en Guanire, un modesto barrio de la ciudad de Puerto La Cruz, a una exclusiva propiedad en la acomodada ciudad de Lechería, ambas en el estado Anzoátegui.
En 2019, se denunció en las redes sociales que Mendiri visitaba oficinas públicas con el objetivo de gestionar el envío de oficios a PDVSA, para que la petrolera realizara pagos a empresas contratistas con mala reputación.
Desde la llegada de Mendiri a Zuma Seguros, la aseguradora se encargó de asegurar las flotas de aviones de varias aerolíneas venezolanas, incluyendo Rutaca, propiedad de Carlos Silva, y en cuya nómina estuvo Mendiri hasta 2016.
Zuma Seguros obtuvo otros dos contratos por el mismo concepto con la aerolínea Avior, entre 2018 y 2019, y con Turpial Airlines, entre 2019 y 2020. Esta última aerolínea es propiedad del coronel retirado de la Aviación, Pedro del Valle Cestari Navarro, vinculado al mayor general Giuseppe Yoffreda Yorio, un militar retirado con gran influencia en el círculo chavista.
Gustavo Mendiri fue la figura clave que consiguió que el Tribunal Supremo de Justicia se pronunciara en contra de la sentencia de embargo preventivo que un Tribunal de Primera Instancia del estado Bolívar había emitido en 2021 contra Rutaca. Esta sentencia afectaba a dos hangares de la empresa en el aeropuerto de Ciudad Bolívar. Todo comenzó cuando Eugenio Molina Anaya, quien en aquel entonces era el presidente de Rutaca, propuso vender una aeronave de la aerolínea al empresario Julio César Cuesta Eisler por 2,5 millones de dólares. Según Cuesta Eisler, el acuerdo al que llegaron estipulaba que él realizaría pagos graduales y que, una vez que hubiera pagado el 65% del monto total, es decir, 1,6 millones de dólares, recibiría el avión.
No obstante, en 2010, a pesar de que Cuesta ya había realizado pagos por un total de 1,84 millones de dólares, aún no había recibido la aeronave. Por lo tanto, logró negociar un nuevo acuerdo con los deudores, en el que el monto que había desembolsado hasta entonces se convertía en un «préstamo para la adquisición de bienes y servicios» de la aerolínea. El 30 de enero de 2018, se firmó un nuevo compromiso en el que la deuda fue transferida al nuevo propietario de Rutaca, Carlos Silva, quien tampoco cumplió con el pago.
Daniel Haro Méndez: Un viaje desde el volante hasta Marinos
Con la adquisición del equipo Marinos de Anzoátegui, Daniel Florencio Haro Méndez fue catapultado a la posición de vicepresidente ejecutivo club deportivo. Su ascenso no se detuvo allí, ya que en enero de 2013, fue elegido alcalde de Cantaura, en el estado Anzoátegui.
Pero, ¿quién era Daniel Haro Méndez antes de su meteórico ascenso? Su historia comienza en los asientos delanteros de un vehículo, como chofer de Luis Marín, un alto directivo de Pdvsa y expresidente de Citgo. Fue en este entorno donde Haro Méndez se familiarizó con los entresijos de la industria petrolera venezolana y conoció a varios de sus actores clave. Este conocimiento le sería útil más tarde, cuando decidió sumergirse en la política como líder del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en Anzoátegui.
Sin embargo, su carrera política no estuvo exenta de controversia. En febrero de 2022, Haro Méndez fue arrestado en Venezuela por su presunta participación en una red de contrabando ilegal de combustible. Anteriormente, también había sido acusado de exportar ilegalmente chatarra de plantas petroleras desmanteladas.
Muy probablemente las conexiones de Haro Méndez jugaron un papel crucial en la compra de Marinos de Anzoátegui en 2012. El equipo, que había caído en manos de Gustavo Petricca, miembro de la familia propietaria de la Universidad Santa María, fue adquirido después de que José Zambrano Lucero abandonara el club y huyera a Estados Unidos, en medio del colapso de su banco, Banorte.
La relación entre Gustavo Mendiri y Daniel Haro Méndez fue tal que Mendiri, en su calidad de abogado, asistió a Haro Méndez durante su divorcio de María del Carmen Morales Pérez en 2014, cuando Haro Méndez era alcalde.
Luis Silva Caraballo
Luis Alberto Silva Caraballo, hermano del beisbolista Carlos Silva, asumió el cargo de vicepresidente del equipo de baloncesto Marinos de Anzoátegui, justo después de que se concretara la venta del equipo en enero de 2012.
Además, Luis Silva Caraballo ha desempeñado un papel crucial en Rutaca, aerolínea donde ha ejercido como presidente ejecutivo. En los últimos años, Silva ha sido una figura notoria en la aerolínea y se podría decir que es el encargado de gestionar los negocios de su hermano, Carlos Silva.
Luis también ocupa el cargo de gerente en RUTACA CARGO 52 LLC y RUTACA ESPRESS 52 LLC, dos compañías recientemente establecidas en Florida en febrero de 2024. Además, desde 2013, ha sido gerente en Florida de la firma RUTAS AEREAS, LLC, tras la adquisición de Rutaca por parte de su hermano.
Ronny Pineda
Ronny José Pineda Rodríguez es otra figura, más recientemente notoria, en la aerolínea Rutaca, desempeñándose como operador de la misma en República Dominicana. Desde 2012, Pineda Rodríguez ha figurado como director de diversas empresas en territorio dominicano, entre ellas Cielos Dominicanos (dedicada al transporte aéreo), Quass y Representaciones Awt Dominicana (ambas enfocadas en la compra de activos relacionados con la industria aeronáutica), Servitrana (especializada en el transporte de mercancías e importación y distribución de equipos pesados), y Venefly Dominicana (una línea aérea).
A principios de los años 2000, Pineda ocupó el cargo de gerente regional de Aeropostal (Aeropostal Alas de Venezuela) en Santo Domingo. Además, fue vicepresidente de operaciones de la aerolínea «Venezolana» hasta al menos 2015. En 2019, se desempeñó como director de ventas internacionales de Avior Airlines y representante legal de Turpial Airlines en República Dominicana. Ese mismo año, figuro como director de la empresa Turpial Airlines en Santo Domingo.
El nombre de Ronny Pineda Rodríguez también aparece en Charteringdo, S.A., una empresa registrada en Panamá en 2016, cuyo presidente es Miguel Alberto Jiménez Penson, gerente de ventas de Rutaca en República Dominicana.
Además de su participación en la industria aeronáutica, Pineda Rodríguez ha estado involucrado en otros negocios en territorio dominicano. El 6 de marzo de 2013, figuró como director de las empresas Condeaventuras y Dominicana de Antier, ambas con la misma dirección en la Ave. Winston Churchill, Esq. Paseo de los Locutores, Centro Comercial Plaza Las Américas, en Santo Domingo.
El humorista venezolano Benjamín Rausseo, más conocido como «Er Conde del Guácharo», mencionó en una entrevista en julio de 2015 que estaba en conversaciones con «inversionistas» para establecer sus parques Condeaventuras y Dominicana de Antier en Punta Cana, República Dominicana.
En 2014, Pineda Rodríguez dirigió la empresa Tacomiendo en el Centro Comercial Plaza Las Américas. Esta empresa, dedicada a la venta y distribución de todo tipo de alimentos, comparte su nombre con una franquicia de comida mexicana.
Pero había otro «negocio» que, dicho de algún modo, llevó a la cárcel a Ronny Pineda Rodríguez en el año 2013. A principios de junio de ese año, se supo que una jueza dominicana había dictado una medida de prisión preventiva contra Pineda en la cárcel del nuevo modelo de San Pedro de Macorís. En aquel momento, el ejecutivo aeronáutico, identificado como «vicepresidente de una aerolínea venezolana», fue acusado de violencia de género y llevado a juicio por agredir a su esposa, Giovanna Durant Pacheco, con quien ocho años antes había tenido una hija.
Durant Pacheco, de origen peruano, era la presentadora del programa infantil «El Show de Camila», que se emitía en el canal de televisión Digital 15. Pacheco relató que durante años había sido víctima de agresiones por parte de Pineda, que le habían causado daños físicos y problemas de depresión. Según contó la presentadora de televisión infantil a medios dominicanos, el 10 de abril de 2013 fue agredida por el ejecutivo aeronáutico, con quien había estado casada durante 9 años, hasta perder el conocimiento.
Giovanna Durant narró que cuando Pineda Rodríguez se enteró de que la madre de ella había presentado una denuncia en contra del ejecutivo aeronáutico, no dejó de golpear a la presentadora. Además de golpearla en el busto y en el rostro, también la insultó e intentó asfixiarla con una almohada. Otras agresiones ocurrieron después de que la presentadora le reclamara a Pineda por una supuesta infidelidad. La pareja mantenía una propiedad en Miami, ciudad a la que en ocasiones Pineda viajaba.
Durante el juicio, Ronny José Pineda admitió haber golpeado a su esposa, aunque intentó minimizar los hechos y presentarse como víctima.
El expediente del caso incluyó un certificado del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) que confirmaba las agresiones físicas y psicológicas sufridas por la presentadora a manos de su marido. en los folios del expediente se indicaba:
… «el día 30 del mes de mayo del año 2013, siendo aproximadamente las 4:45 de la madrugada, en la avenida Bolívar … sector La Julia del Distrito Nacional, Ronny José Pineda Rodríguez fue arrestado en flagrante delito por agredir físicamente en varias partes del cuerpo a la señora Giovanna Alberta Durant Pacheco, en la región frontal, en hemitorax derecho, tenía abrasión en la región inglinar derecha, abrasión antebrazo derecho cara externa abrasión y mano izquierda mordedura humana, lesión curable en un periodo de 0 a 10 días como establece Certificado Médico Legal número 12716, emitido por el médico legista Ernesto Dotel, anteriormente en fecha 10 de abril de 2013, a las 9:00 de la noche, el imputado encontrándose en la residencia de la víctima Giovanna Alberta Durant Pachecho, procedió a agredirla físicamente tal como se hace constar en otro certificado Médico Legal. En esa ocasión la víctima presentó en región nasal abrasión, mama izquierda en cara interna abrasión, brazo derecho cara interna abrasión, brazo derecho cara interna equimosis, brazo izquierdo cara externa abrasión antebrazo izquierdo cara interna abrasión, antebrazo derecho con interna abrasión; presenta en pierna derecha cara interior equimosis lesiones curables en período de 0 a 15 días»…
Ronny Pineda Rodríguez, quien en 2007 había registrado la empresa «Camila y El Mundo de los Niños», es ahora ejecutivo de la aerolínea Rutaca. Pineda fue el encargado de anunciar, en abril de 2023, la llegada de 110 turistas de Trinidad y Tobago a la isla de Margarita, en Venezuela, en un vuelo de Rutaca. Pineda también figura como director de la empresa Rutas Aéreas CA Rutaca, registrada en 2018 en República Dominicana.
En una fotografía tomada en abril de 2023, se puede ver a Pineda junto a Luis Silva Caraballo, hermano del propietario de Rutaca, Carlos Silva, mientras el ministro de Turismo, Alí Padrón, ofrecía declaraciones a la prensa.
El propio Pineda dio declaraciones al canal estatal Venezolana de Televisión, considerando un éxito la llegada de los turistas trinitarios a la isla de Margarita, después de 8 años de suspensión de los vuelos charter turísticos entre Trinidad y Tobago y Venezuela.
Jesús Campos
Jesús Campos Spadavecchia asumió el cargo de presidente ejecutivo del equipo de baloncesto Marinos de Anzoátegui en febrero de 2017, después de que Gustavo Mendiri se convirtiera en accionista de Zuma Seguros.
Antes de asumir nuevas responsabilidades al frente de la aerolínea Rutaca, Campos Spadavecchia disfrutaba de unas vacaciones en la idílica isla de Bonaire en septiembre de 2015. Anteriormente, había ocupado el cargo de gerente de los estatales Abastos Bicentenario en el Oriente venezolano y de jefe del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) en Anzoátegui.
Se cree que Campos fue ascendido a la Gerencia de Operaciones de Rutaca como recomendado de una gerente corporativa próxima a los empresarios Carlos Silva y Franklin Durán, cercana también a apoderados de Silva y Durán. En algún momento se especuló incluso que Durán había sido el comprador del aerolínea.
Durante su gestión, Campos inició la rehabilitación y repotenciación de las instalaciones físicas de los Abastos Bicentenario, aunque dejó estos proyectos inconclusos.
Tras su llegada a Rutaca en 2015, Jesús Campos se convirtió en ejecutivo de Marinos de Anzoátegui, el club también propiedad de Carlos Silva Caraballo. Desde entonces, ha sido ejecutivo de negocios de Rutaca Airlines en Estados Unidos y CEO en Miami de la agencia de viajes Ready2Travel.
Campos es hijo de Jesús Rafael Campos, un ahora fallecido locutor radial , conocido en el estado Anzoátegui como “Campitos”. Durante años, “Campitos” moderó programas de entrevistas y opinión y se enorgulleció de haber sido uno de los primeros en entrevistar a Hugo Chávez después de que este saliera de prisión en los años 90. En aquel entonces, Chávez, quien aún no se había convertido en presidente, había estado encarcelado por su participación en el golpe de Estado contra el entonces mandatario venezolano Carlos Andrés Pérez.
Como ejecutivo de Rutaca, Jesús Campos Spadavecchia estuvo junto a Carlos Silva en enero de 2020, cuando anunciaron oficialmente la apertura de una nueva oficina comercial de la aerolínea en Trinidad y Tobago.
Reflexiones finales
En el intrincado laberinto de la política y la administración pública venezolana, personajes como Carlos Silva Caraballo y Gustavo Mendiri han sabido moverse con astucia. Sus conexiones en los más altos niveles les han permitido acumular un capital considerable, adquiriendo empresas y, en los casos más extremos, despojando a los legítimos propietarios de sus bienes a través de maniobras legales y el uso de influencias.
Sin embargo, aún quedan incógnitas por desvelar. ¿Hasta dónde se extienden los tentáculos de estos individuos en las entidades estatales de Venezuela? ¿Cuánto han amasado gracias a sus negocios? Y quizás la más inquietante de todas, ¿qué otras empresas intentarán arrebatar mientras existan funcionarios susceptibles de corrupción en Venezuela y fondos que puedan ser saqueados?
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