El dolor articular es solo uno de los síntomas clínicos de la artrosis. Se trata de una de las principales causas de discapacidad física en las personas mayores en todo el mundo. Además, el número de personas con artrosis y la tensión resultante en el sistema de salud podría aumentar con el envejecimiento de la población y la prevalencia de la obesidad.
No existe cura para la artrosis, pero se puede optar por un tratamiento que tiene como objetivo minimizar sus síntomas y, por lo general, incluye la modificación del estilo de vida y el uso de analgésicos. Este artículo proporciona una descripción general de los factores de riesgo, las causas, los signos y los síntomas de la enfermedad, así como un protocolo de tratamiento integrador que utiliza suplementos dietéticos.
¿Qué es la artrosis?
La artrosis es la forma más común de artritis, una enfermedad articular progresiva. Se caracteriza por esclerosis ósea subcondral, degradación de la matriz del cartílago y formación de osteofitos. La patogenia de la enfermedad se produce a través de múltiples vías que provocan inflamación, envejecimiento biológico de los condrocitos y pérdida de componentes estructurales, incluidos el colágeno tipo II y los glicosaminoglicanos (como el Condroitín sulfato y el ácido hialurónico).
Debes saber que esta enfermedad a menudo se evalúa utilizando el índice de artrosis de rodilla WOMAC (Western Ontario and McMaster Universities), un cuestionario de síntomas que examina la rigidez, el dolor articular y la limitación de la función física. El índice de Lequesne también se usa comúnmente para evaluar el dolor en la articulación de la rodilla, la limitación de la función y la distancia máxima caminada.
Causas y factores de riesgo
Se han identificado varias causas y factores de riesgo en el desarrollo de artrosis:
- Envejecimiento
- Ser mujer
- Carga mecánica excesiva
- Predisposición genética
- Inflamación
- Obesidad
- Traumatismo
Signos, síntomas y complicaciones
Los cambios estructurales en la artrosis pueden provocar varios síntomas y eventualmente progresar a una discapacidad física. Estos suelen estar presentes en rodillas, caderas, manos y columna:
- Crepitación con el movimiento.
- Dolor y rigidez en las articulaciones.
- Movilidad articular limitada.
- Hinchazón.
- Sensibilidad en la zona.
Suplementos para el dolor articular
El tratamiento médico de la artrosis incluye fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), analgésicos y corticosteroides. El uso prolongado de estos medicamentos puede provocar efectos secundarios graves, que a menudo incitan a los pacientes a explorar tratamientos complementarios. Se ha demostrado que los suplementos alimenticios que se describen a continuación reducen eficazmente los síntomas de la artrosis:
- Glucosamina
Es un amino monosacárido soluble en agua que se produce de forma natural en el cuerpo y está presente en grandes cantidades en el cartílago articular. Su compuesto es un componente básico de los glicosaminoglicanos presentes en la matriz del cartílago y el líquido sinovial, que reduce la fricción entre el cartílago en las articulaciones sinoviales.
Como suplemento alimenticio, se ha sugerido que la glucosamina se absorbe parcialmente en el intestino y se dirige a las articulaciones, donde ejerce acciones protectoras, como mejorar la movilidad y el dolor. Los estudios individuales, aleatorizados, doble ciego y controlados con placebo (RDBPC) demuestran consistentemente la efectividad de la glucosamina para reducir el dolor y los síntomas globales de la artrosis.
La glucosamina se recomienda comúnmente en combinación con condroitina, ya que las investigaciones muestran que la mezcla puede mejorar la efectividad.
- Cúrcuma (Curcuma longa)
La curcumina es un pigmento antiinflamatorio y el componente activo primario de la cúrcuma. Se ha demostrado que tiene más de 100 dianas moleculares, siendo las más importantes las enzimas proinflamatorias, así como los factores de transcripción inflamatorios y su expresión genómica.
Una formulación de curcumina conocida como Meriva® es un complejo de fitosoma de curcumina-fosfatidilcolina patentado. La investigación ha demostrado que Meriva® puede usarse para mejorar la calidad de vida y disminuir el uso de AINE en pacientes con artrosis. Se trata de un suplemento seguro y se ha demostrado que la tolerabilidad es comparable a la del ibuprofeno y el acetaminofén (paracetamol).
- Colágeno
Es una proteína estructural que se encuentra en los tejidos conectivos y fibrosos del cuerpo (huesos, cartílagos, tendones, ligamentos, discos intervertebrales, piel y cabello). Hay aproximadamente 28 tipos diferentes de colágeno, pero los más comunes son:
- Tipo I (dermis, tendones, ligamentos, hueso)
- Tipo II (cartílago, cuerpo vítreo, núcleo pulposo)
- Tipo III (piel, pared vascular, tejido reticular)
- Tipo IV (lámina basal, capa epitelial de las membranas basales)
- Tipo V (pulmón, córnea, cabello, membranas fetales, huesos)
Como suplemento dietético, el colágeno hidrolizado se produce a partir de varias fuentes, que incluyen la membrana natural de la cáscara de huevo (NEM®), que proporciona colágeno tipo I, cartílago de pollo (tipo II), bovino (I y III) y colágeno de origen marino (I). Ciertos suplementos de colágeno también pueden contener sulfato de condroitina y ácido hialurónico de origen natural, lo que hace que su composición sea similar a la del cartílago articular humano.
La investigación sugiere que el colágeno hidrolizado se utiliza como sustrato para construir la red fibrilar de colágeno, lo que puede explicar sus efectos beneficiosos sobre los síntomas de la artrosis. Además, los estudios apuntan a que el colágeno puede resultar en una reducción en el índice WOMAC, la puntuación de rigidez y la puntuación VAS. También se ha comprobado que el tipo I se encuentra en la membrana de la cáscara de huevo y mejora el dolor y la rigidez de las articulaciones.
- Boswellia serrata
Es una planta medidinal con efectos antiartríticos, analgésicos y antiinflamatorios. El ácido 3-O-acetil-11-ceto-beta-boswélico (AKBA), considerado su componente más bioactivo, se encuentra en el extracto de resina de goma de la planta. Se ha demostrado que el AKBA inhibe la enzima 5-lipoxigenasa (5-LOX), que participa en la síntesis de leucotrienos, metabolitos del ácido araquidónico, en la cascada inflamatoria.
Dos formulaciones patentadas, Aflapin® y 5-Loxin®, están estandarizadas para contener 20% y 30% de AKBA, respectivamente. Se ha demostrado que 5-Loxin® inhibe el factor de necrosis tumoral α y la interleucina 1β, que son citocinas proinflamatorias. Por su parte, Aflapin® puede inhibir la enzima MMP-3 involucrada en la degradación del cartílago. Según apuntan diversos estudios, estos extractos de Boswellia son seguros para su uso a largo plazo en humanos.
- Sulfato de condroitina
En el cuerpo, el sulfato de condroitina proporciona estructura, resistencia y elasticidad al tejido del cartílago. Concretamente, consiste en glicosaminoglicanos y está unido a proteínas, formando parte del cartílago. Los suplementos de condroitina se fabrican a partir de fuentes animales, incluido el cartílago bovino y de tiburón.
Los estudios clínicos han demostrado que la suplementación con sulfato de condroitina puede retrasar la progresión de la artrosis, aumentar la función articular, reducir el dolor y elevar el volumen total de cartílago. Un estudio analizó los efectos del sulfato de condroitina en la respuesta del cerebro a la estimulación del dolor mediante imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI) en pacientes con osteoartritis de rodilla. El dolor disminuyó en los individuos que recibieron CS en comparación con el grupo que recibió el placebo.8
Se han propuesto varios mecanismos responsables de los beneficios del sulfato de condroitina. Entre ellos, encontramos algunos como la supresión de mediadores inflamatorios, la estimulación de la producción de la matriz del cartílago extracelular y la inhibición de la degradación del cartílago.
Conclusión
Se ha demostrado en ensayos clínicos que varios nutrientes y botánicos, que incluyen glucosamina, cúrcuma, colágeno, Boswellia serrata y sulfato de condroitina, reducen los síntomas de la artrosis.
Por último, hay evidencia preliminar prometedora que demuestra una reducción en los síntomas de artrosis con extracto de mejillón de labios verdes, L-carnitina, y pycnogenol. Se necesitan más ensayos clínicos para demostrar dosis eficaces y seguras. Si padeces artrosis, recomendamos que acudas a tu proveedor de atención médica para averiguar si estos suplementos son adecuados para tu plan de bienestar.