El dictador venezolano volvió a atacar a los funcionarios del bloque que fiscalziaron las elecciones regionales del 21 de noviembre y los acusó de intentar manchar el sistema electoral del país
A una semana de las elecciones regionales de Venezuela, el dictador Nicolás Maduro volvió a atacar este domingo a la delegación de la Unión Europea (UE), al calificar a sus integrantes como “espías”, que lo que buscaban era “manchar” el proceso electoral.
“La UE vino como enemigos y no encontraron ni un elemento para dejar las elecciones en Venezuela. Un informe improvisado intentó manchar el sistema electoral del país (…) Ellos no eran observadores internacionales, andaban por el país espiando la vida social y económica en el país”, manifestó el mandatario chavista, quien en las últimas horas regresó de su viaje a Cuba.
Asimismo, pese a las denuncias de fraude, sostuvo que “a la oposición le ha ido bien”: “La oposición tuvo su espacio, con una buena cosecha de gobernaciones y una buena cosecha de alcaldías. Para nosotros es bueno, a la oposición le ha ido bien”.
En esa línea, el dictador venezolano aseguró que el domingo pasado “hubo elecciones justas y transparentes”, en las que “el chavismo arrasó”: “La revolución sigue invicta, todo es producto del esfuerzo de nuestro pueblo”.
El martes pasado, Isabel Santos, jefa de la misión observadora de la Unión Europea en Venezuela, presentó su informe preliminar sobre las elecciones regionales del domingo, en el que se constató la “falta de independencia judicial y la no adherencia al estado de derecho”.
La diplomática portuguesa, que volverá al país a fines de enero o principios de febrero -según dijo- para presentar el reporte completo, añadió que “la campaña política estuvo marcada por el uso extendido de recursos del Estado”.
Expresó que “no hubo sanciones del Consejo Nacional Electoral (CNE) a las violaciones” y que los observadores del bloque “fueron testigos del establecimiento de puntos de control en los 23 estados y el Distrito Capital, a pesar de su prohibición explícita por el CNE”.
“Lamentamos el asesinato de un votante que estaba haciendo la fila para votar en Zulia. Un atentado en que resultaron heridas otras personas”, señaló la jefa de la misión de la UE, quien además indicó que se constataron “agresiones a un observador electoral (aclaró que no era de la Unión Europea) y a dos defensores de derechos humanos”. “Actos como estos no tienen cabida en un proceso democrático”, aseguró.
“Hubo muchas especulaciones sobre la naturaleza de nuestra misión. Es independiente, neutral e imparcial. Las misiones de observación no son un instrumento de injerencia en la vida de los países”, aclaró; mientras que resaltó que “el informe es solo preliminar. Quedan aún etapas críticas, incluyendo la finalización del escrutinio y resoluciones de posibles impugnaciones que la Unión Europea continuará observando”, detalló.
En ese sentido, a una semana de las elecciones del pasado 21 de noviembre, el Consejo Nacional Electoral todavía no proclamó a un ganador en el estado de Barinas, el más valioso para la dictadura chavista.
En su primer boletín oficial del pasado domingo, el presidente del CNE, Pedro Calzadilla, dijo que el hermano del fallecido Hugo Chávez y candidato del PSUV a la gobernación de Barinas, Argenis Chávez, tenía una ventaja sobre el aspirante de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Freddy Superlano, de tan solo 673 votos, con el 90,2% escrutado.
Sin embargo, al día siguiente, al ofrecer un segundo boletín, Calzadilla no mencionó a Barinas y hasta la fecha no se ha anunciado cuál de los dos es el gobernador electo en la entidad.
Superlano y todo el arco opositor han venido denunciando fraude, asegurando que el candidato de la MUD fue el ganador de la contienda.
El pasado viernes Superlano sostuvo que los funcionarios afines a la dictadura de Nicolás Maduro “saben” que Chávez perdió y que no es “invento”: “Los mismos números que manejamos nosotros, los manejan ustedes y hoy ustedes tienen la oportunidad de rendir honor a sus investiduras y funciones para los que se formaron”.
Este domingo, no obstante, Diosdado Cabello amenazó con impugnar los resultados electorales en caso que el CNE, afín al régimen, anuncie una ajustada victoria de la oposición.
“Nosotros hemos perdido alcaldías por cinco votos (…) Donde haya que impugnar, se impugna. Donde ganemos por un voto lo vamos a defender. No nos importa lo que diga el mundo entero, que no somos capaces de entregar por uno”, advirtió el vicepresidente del Partido Socialista Unidos de Venezuela (PSUV), en una entrevista concedida al periodista oficialista Ernesto Villegas.
“Para nosotros Barinas es Chávez, es un bastión nuestro. Ahí nació el comandante Chávez. En la última campaña el comandante dijo de Sabaneta para Miraflores, y arrancamos aquella épica. Tiene para nosotros una razón espiritual”, agregó.
En sintonía con las declaraciones de Maduro, Cabello la semana pasada insultó a la Misión de de la Unión Europea, al calificar de “estúpidos” a los observadores tras la presentación del informe preliminar. Además, adelantó que la dictadura no permitirá que los delegados retornen a Venezuela el próximo mes de enero: “Esta gente cree que nosotros somos colonia. Ya tenía el informe hecho. Además ellos dicen que vienen en enero. ¿Cómo es eso que ustedes creen que pueden venir para Venezuela cuando les da la gana? ¡No, compadre, eso no es así!”.