Conozca la historia de la prepago, el mafioso y la esposa «engañada» que lavan petrodólares en paraísos fiscales
Nada es más tentador para un capo de la mafia que una mujer bella, si es una miss venezolana mejor: preparadas para ser hermosas y complacientes con algunos enchufados o políticos.
Valentina Figuera, Miss Grand International 2019 y modelo, fue fichada por el corazón de Daniel Uzcátegui Specht, un ladrón de cuello blanco que junto a su padre llevó el maletín a Antonini Wilson y desfalcó PDVSA en tiempos de Chávez.
Uzcátegui está casado (al menos eso aparenta en Instagram) con otra ex modelo criolla llamada Verónica Leal. De esta última hay poca información, salvo las 5 cuentas bancarias a su nombre en dos paraísos fiscales (Suiza y Barbados) en las que lava $5.000.000 millones de su marido, producto del desfalco a la petrolera.
En la autopista Francisco Fajardo de Caracas, una valla gigante al lado del Río Guaire, promociona a Hello C.A., una empresa de extensiones de cabello para mujeres, una pequeña lavadora de dólares de Figuera en Venezuela.
Valentina también forma parte de una agencia de modelos VIP cuya accionista es la ex miss Brenda Ramírez, amante de Alejandro Betancourt, quien esconde una red de prostitución y legitimación de capitales internacional bajo la fachada de patrocinio artístico.
La esposa de Uzcátegui, dueña de una inmobiliaria en España tiene una relación con Luis Fernando Vuteff, yerno del ex alcalde metropolitano Antonio Ledezma, acusado por EEUU de estar en un esquema para lavar $1.200 millones de PDVSA, y Eduardo Capriles, otro ladrón de Bariven y la CVG.
A Vuteff lo arrestaron en España en octubre de 2018 en medio de la Operación Carabela contra el blanqueo de capitales. La acción condujo a la captura del ex vicemistro de Energía Eléctrica Nervis Villalobos y a la incautación de más de 130 inmuebles en Madrid y Marbella valorados en más de 72 millones de euros.
Uzcátegui, tiene orden de captura del Ministerio Público de Venezuela por estar involucrado en una olla de corrupción que salpica al pesado del chavismo Tareck El Aissami, es hijo de Diego Uzcátegui Matheus, quien en el 2017 regresó a PDVSA pese al escándalo internacional de Antonini Wilson en Argentina.